El Chef Digital: Cocinando Estrategias y Experiencias
Soy Salvador Carrasco Fernández, aunque muchos me llaman el Chef Digital. No porque lleve un gorro de chef, sino porque veo el marketing como una cocina: un espacio donde las ideas, los datos y la creatividad se mezclan para crear algo inolvidable.
Crecí en Sevilla, rodeado de una rica cultura gastronómica y la calidez de las tradiciones. Desde pequeño, las costumbres locales y los sabores auténticos me enseñaron que lo único siempre tiene su receta. Por eso, mi formación comenzó en el análisis y la estrategia: me licencié en Investigación y Técnicas de Mercado y completé un MBA en Comercio Internacional. Estas bases técnicas fueron mis primeros utensilios en la cocina del marketing.
Mi primer gran reto profesional fue en el comercio exterior, donde llevé productos locales a mercados internacionales. Era como diseñar un menú global: entender los gustos de cada región, adaptar las presentaciones y llevar la esencia de lo local a cualquier rincón del mundo. Sin embargo, sentí que me faltaba algo: ese toque creativo que convierte lo correcto en extraordinario.
Fue entonces cuando di el salto al marketing. Durante más de una década, he trabajado en sectores como la ingeniería, la agroindustria, el turismo y el comercio electrónico. He sido responsable de marketing, director de ventas, consultor y fundador. En cada uno de estos roles, aprendí a combinar los ingredientes del branding, la comunicación y las estrategias digitales para crear experiencias inolvidables.
Además, mi pasión por la gastronomía me llevó a formarme como cocinero profesional. No solo por amor al arte culinario, sino porque creo que la gastronomía es una poderosa metáfora del marketing: el detalle importa tanto como el todo. Al igual que en un plato, no solo importa el sabor; importa cómo lo cuentas, cómo lo presentas y cómo haces que la experiencia sea memorable.
En mi trayectoria desarrollé el Método 403, una metodología basada en la observación del consumidor y el análisis de datos. Es como una receta perfeccionada con cada prueba: se trata de entender las necesidades reales y conectar con las personas de manera accesible y humana, tanto en lo digital como en lo físico.
Hoy, mientras curso un máster en Marketing Gastronómico, sigo explorando el apasionante cruce entre tecnología, tradición y creatividad. Cada proyecto es para mí un plato nuevo: las tradiciones son los ingredientes principales, la tecnología es el fuego que transforma, y la creatividad es el toque que eleva el resultado.
Y así sigo, diseñando estrategias y experiencias que combinan lo mejor de la cocina y el marketing. Si quieres saber más o necesitas una receta para tus ideas, no dudes en contactar conmigo. Porque, como en la mejor sobremesa, las grandes ideas siempre nacen de una conversación.
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