Redondo de choto al vino tinto

Hay recetas que huelen a cocina antigua, a domingos en familia, a la cazuela que lleva horas al fuego sin necesidad de ser vigilada. El redondo de choto al vino tinto es uno de esos platos que encarna la tradición en estado puro: humilde, sabroso, con carácter y un fondo de historia que se cuece a fuego lento.

Un guiso que habla del interior de España, del aprovechamiento de cortes nobles y del uso del vino como hilo conductor entre el campo y la cocina. Aquí no hay prisas, ni florituras. Solo carne, vino, ajo y tiempo. Y el resultado es pura memoria.


🍖 Ingredientes para 8 personas:

  • 1 kg de redondo de choto

  • 100 g de tocino entreverado

  • 8 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

  • 1 diente de ajo

  • Harina (para rebozar)

  • 1 vaso de vino tinto de Rioja

  • 1 vaso de caldo

  • Sal y pimienta al gusto


🔥 Elaboración paso a paso: cuando menos es más

1. Preparar la carne: sazonar el sabor desde dentro

Corta el tocino entreverado en tiras y, con ayuda de una aguja de mechar, introdúcelo en el interior del redondo por 4 o 5 puntos. Esta técnica, antigua y efectiva, aporta jugosidad a una pieza que, por su naturaleza magra, lo agradece.

Sazona la carne con sal y pimienta y pásala ligeramente por harina. Ese velo sutil ayudará a crear una costra dorada que retendrá los jugos durante la cocción.

2. Sellar con paciencia

Calienta el aceite en una cazuela amplia. Coloca el redondo y dora a fuego medio, sin prisas, girándolo con mimo para que se dore por igual sin quemarse. Añade el ajo pelado y picado para que se dore junto a la carne y perfume el conjunto.

3. Vino, caldo y fuego lento

Cuando el redondo tenga un color tostado por fuera, riega con el vino tinto. Deja que el alcohol se evapore y añade el caldo. A partir de aquí, solo queda dejarlo cocer a fuego muy suave, girándolo de vez en cuando, hasta que el líquido se consuma y se forme una salsa oscura y untuosa.

Este proceso puede durar aproximadamente una hora, dependiendo de la fuerza del fuego y de la evaporación. Es un guiso de los de antes: cuanto más suave el fuego, más tierna la carne.

4. Enfriar, cortar, servir

Una vez cocido, retira el redondo y deja que enfríe por completo antes de cortarlo. Esto es clave para poder hacer lonchas finas y limpias, sin que la carne se deshaga.

Calienta la salsa, cuélala si lo prefieres más fino, y sirve sobre las lonchas o en salsera aparte. El resultado: un plato rústico y elegante a la vez, que sabe a cocina bien hecha.


🍷 Maridaje: cuando el vino también es parte del plato

Este guiso pide a gritos un vino tinto ligero de uva tempranillo, con paso fresco, aromas vegetales y bien estructurado. La propia D.O. Rioja ofrece excelentes opciones que armonizan con la intensidad y melosidad del plato.


🕯️ Cocina que cuenta historias

El redondo de choto es uno de esos platos que no aparecen en las cartas de moda, pero que no se olvidan jamás. Forma parte del recetario emocional, ese que habla de abuelas, cazuelas hondas y sobremesas largas.

En Método 403 creemos que la cocina es también un reflejo de los valores que queremos conservar: tiempo, producto y autenticidad.

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